Ordenadores reacondicionados: la elección preferida por los diseñadores gráficos

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Hay cosas que son imprescindibles para una persona que quiera vivir de verdad en el siglo XXI. Es el siglo de la tecnología, el siglo de los avances más rápidos y certeros de todos cuantos se han producido a lo largo de la Historia. Por eso, nadie se puede olvidar de la importancia que tiene un ordenador en los momentos en los que nos encontramos. Todo el mundo tiene claro que hablamos de una herramienta que nos hace la vida más cómoda. Nos permite trabajar, disfrutar de momentos de ocio e incluso comprar por Internet. Una persona podría solamente tener un ordenador y disfrutar de lo lindo de su tiempo libre.

Además de todo lo que ya os hemos dicho, tenemos que decir que nos permite conseguir todas esas cosas con una eficacia muy grande. De nada serviría que nos proporcionaran una tecnología más avanzada pero más lenta. Los ordenadores no solo han ido ganando en lo que tiene que ver con la calidad de los programas y softwares que manejan, sino que también han ganado en rapidez y eficiencia, lo que ha hecho posible que se ganen la confianza de muchas personas, incluso aquellas a quienes no les hacía gracia un instrumento como este en sus orígenes.

Según una noticia que pudimos descubrir en la página web del diario El Economista, en septiembre del año 2018, el 60% de los trabajadores usaba el ordenador a lo largo de su jornada laboral y más de la mitad estaban conectados a Internet. Estamos hablando de una de las cuestiones que prueban la grandeza de las nuevas tecnologías en los tiempos que corren y que ponen de manifiesto que los avances tecnológicos que se han venido produciendo a lo largo de las últimas décadas han servido para implementar mejoras en las empresas.

Es evidente que no todo el mundo necesita el mismo ordenador para trabajar. No realiza el mismo tipo de funciones un empleado público que se encuentra gestionando trámites en un ordenador que un diseñador gráfico que no solo requiere de una serie de programas y softwares especiales, sino al que también le hace falta un ordenador que tenga la capacidad de trabajar con esos programas y softwares sin ralentizarse. La diferencia entre una cosa y la otra, a pesar de que las dos personas estén usando un ordenador, es sideral. Nadie está diciendo que sea mejor una cosa que la otra. Simplemente, son diferentes.

Hay una tendencia que viene siendo bastante común en lo que respecta a los ordenadores empleados por los diseñadores gráficos en el ejercicio de su trabajo. Este tipo de profesionales requieren de un tipo de ordenador que es muy específico y, en los últimos años, muchos de ellos están apostando por la compra de este tipo de ordenadores, pero  reacondicionados. Hacen eso en lugar de adquirir unos nuevos. ¿El motivo? Que los reacondicionados son mucho más baratos y tienen las mismas capacidades que un ordenador nuevo. Es una tendencia que se viene consolidando y que todavía tiene mucho camino por delante en función de la opinión que manejan desde la Tienda IDC.

Un ordenador que esté reacondicionado no tiene por qué ser peor que uno nuevo. Si el aparato en cuestión está más que preparado para la realización de trabajos de diseño gráfico, no cabe la menor duda de que lo va a seguir estando si esas labores de reacondicionamiento se han realizado de una manera correcta. Ni que decir tiene que, si muchos diseñadores gráficos se han decantado por este reacondicionamiento en lugar de por la compra de un ordenador nuevo, será por el hecho de que esas labores se realizan de una manera correcta. En este sentido, nuestro país es mucho más que fiable.

Seguir adaptándose para sobrevivir en el mercado

El diseño gráfico es una de las materias que requieren de una mayor conexión con el presente para ser eficaces y cumplir con las necesidades de la gente y de las empresas. Ese es el motivo por el que se requiere una mayor actualización que en ningún otro campo. Hay que explorar todas las vías para ofrecer nuevas soluciones a los clientes, ya estén compuestas esas alternativas por nuevos diseños que sigan las tendencias de cada momento o nuevas herramientas que nos permitan alcanzar esos objetivos.

La sociedad moderna y digital en la que nos movemos se relaciona de una manera más potente que nunca con la inmediatez. Y eso requiere que el ser humano tenga a mano la mejor de las tecnologías para cubrir todas las necesidades que están ligadas con esa inmediatez. Si no contamos con esas tecnologías, está claro que el proyecto que intentemos desarrollar va a ser infructuoso y que vamos a llevarnos más penas que alegrías de su puesta en práctica.

 

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